Cambiado el: 29/08/2022
Cómo funcionan las semillas de cannabis autoflorecientes y a quién le debemos estas maravillosas semillas
Las semillas de marihuana autoflorecientes son únicas, y de las favoritas entre aquellos que cultivan esta planta. La razón es que estas semillas generan un tipo de planta que requiere muy pocos cuidados y que florece automáticamente – sólo unas semanas después de la germinación.
Las plantas de cannabis que originan de semillas comunes, o incluso semillas feminizadas, son normalmente fotoperiódicas. Las plantas de marihuana fotoperiódicas comienzan a florecer en épocas del año en la que la luz solar por día se ve reducida. Normalmente esta ocurre una vez al año al final del verano, y se puede reproducir artificialmente.
Para cultivar en interiores, uno ha de alterar entre exposición solar y períodos de oscuridad para poder desencadenar los cambios que ocasionan que la planta florezca. Si se hace de la manera correcta, es posible hacer florecer plantas con luz artificial.
Pero las semillas autoflorecientes dan un tipo de planta que , en lugar de depender de la luz para florecer, dependen más bien de la edad de la planta. Florece varias veces al año, independientemente de la cantidad de luz solar que estén recibiendo. ¿Cómo es posible? Hablemos de la planta Cannabis ruderalis para comprenderlo.
Semillas autoflorecientes: los secretos de la ruderalis
Existen tres grandes categorías de Cannabis:
- Indica
- Sativa
- Ruderalis
Ésta última, la ruderalis, puede florecer varias veces al año, al contrario que sus familiares indica y sativa. El descubrimiento de las características del ADN de la variedad ruderalis es lo que habilitó a los expertos a poder crear híbridos con alguna de las otras variedades de Cannabis, indica y sativa.
La variedad ruderalis fue descubierta en 1942 por un botánico Ruso, lo que no es de extrañar, ya que esta variedad es nativa de europa central y del este, donde crecen salvajes sin nadie que se moleste en supervisarlas. Es especialmente resistente al frío. También se ha encontrado creciendo libremente en algunas zonas de América del Norte y Canadá.
Es una planta de tamaño moderado, aproximadamente medio metro, aunque existen excepciones. Florece rápidamente, característica que comenzó a ser explotada alrededor de 1970, cuando se comenzaron a hacer experimentos para crear híbridos con esta planta.
El resultado fue un tipo de Cannabis que, aún conteniendo cantidades de THC o CBD, era capaz de florecer por sí solo. Uno de los pioneros de estos experimentos, Neville Schoenmaker, es el fundador del ahora mundialmente famoso banco de semillas de cáñamo – “Sensi Bank”.
El primer híbrido con capacidad autofloreciente a larga escala, llamado Lowryder, fue creado por un canadiense apodado Joint Doctor (Doctor porro). Esta versión era sumamente pequeña y se desarrollaba completamente en un período de 6 a 7 semanas.
Fue un gran avance, pero todavía faltaba mejorarlo. El contenido de THC en las flores de la Lowryder era todavía muy bajo para poder ser usado recreacionalmente, de modo que el Doctor Porro se puso manos a la obra y creó la Lowryder 2, la que fue todo un éxito.
Lowryder 2 terminó siendo el precursor de la mayoría de los híbridos que vemos hoy en día. Este mismo proceso de creación de híbridos por el que Lowryder fue creado es el mismo usado hoy en día para la creación de otros tipos de híbridos autoflorecientes.
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Las semillas autoflorecientes de marihuana: revolución cultural
La concepción de semillas autoflorecientes de cáñamo revolucionó el mundo del cultivo en interiores por dos razones:
- El tamaño de las plantas
- Más de un florecimiento al año
Y es que gracias a estas dos pequeñas características, se puede cultivar una cantidad mayor de plantas sin ocupar tanto espacio. Además, el espacio rinde más, ya que es posible cultivar hasta tres veces más por año. Aún así es importante notar que una variedad común puede producir lo mismo que una autofloreciente en la misma cantidad de tiempo.
Estas semillas son capaces de florecer en tan poco tiempo como sesenta días después de haber germinado y, en cuestión de semanas, están listas para cosechar: Una completa revolución para el mundo de los cultivadores, y los consumidores, de cannabis.
Además de ser una gran herramienta para científicos y para cultivadores profesionales, las variedades autoflorecientes son el tipo más accesible de cultivar para todos aquellos que son ajenos al mundo de la botánica. En Francia, el cultivo de marihuana ya no es una ofensa criminal, aunque sigue estando prohibido.
En lugares donde sí está permitido, las variedades autoflorecientes prosperan fácilmente en cualquier tipo de ambiente, ya que son resistentes a temperaturas, insectos, y otros factores. Las plantas son tan pequeñas comparadas con las otras variedades que son muy manejables.
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¿Dónde se consiguen las semillas autoflorecientes?
Para propósitos de colección, es muy fácil conseguir semillas de cannabis autoflorecientes: Visita la tienda online de SensorySeeds para encontrar una gran variedad de semillas de Cannabis de todo tipo y de la mejor calidad posible.