Publicado en: 16/12/2022
El número de colmenas ha caído en picado en todo el mundo, pero según un estudio de estados unidos las abejas vuelven a proliferar en las plantaciones de marihuana.
A lo largo de los años, la población de abejas se ha reducido drásticamente en todo el mundo debido a las actividades humanas.
Si las abejas desaparecieran por completo, la biodiversidad de todo el planeta se vería comprometida, al igual que la supervivencia humana.
De hecho, se calcula que casi tres cuartas partes de la producción agrícola mundial dependen de estos insectos.
Sin embargo, un estudio reciente realizado en Estados Unidos sugiere que las plantaciones de marihuana proporcionan el entorno ideal para que estos preciosos insectos se salven y prosperen.
Entonces, ¿todavía hay tiempo?
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¿Se están extinguiendo las abejas?
Entre las consecuencias del calentamiento global se encuentra también, por desgracia, una drástica disminución del número de abejas.
Las causas de la muerte de estos insectos a la que asistimos desde hace años se deben a las actividades del hombre sobre el medio ambiente y, en particular, el deterioro de su hábitat natural en la tierra, la contaminación y el uso masivo de insecticidas y pesticidas en la agricultura son los que más han contribuido.
Se calcula que en cinco años se han perdido hasta 10 millones de colmenas en todo el mundo, de las cuales 200 mil sólo en Italia. Este preocupante fenómeno está tan extendido que se ha acuñado un término para describirlo: Trastorno de Colapso de las Colonias.
Este escenario pone en peligro no sólo el futuro de la apicultura, sino de todo el sector agrícola, ya que más del 75% de los cultivos alimentarios del mundo dependen de su laboriosidad, es decir, de la polinización, para su rendimiento y calidad.
Las abejas son, de hecho, insectos polinizadores, cuya actividad asegura la polinización de las plantas y la aparición de diversos cultivos, preservando así los hábitats y las especies vivas que albergan.
Se entiende, por tanto, cómo la matanza de estos insectos puede amenazar nuestra seguridad alimentaria.
Investigación científica que relaciona la marihuana con las abejas
La buena noticia viene de Estados Unidos, donde un reciente estudio de la Universidad de Cornell ha descubierto que las abejas han empezado a extenderse de nuevo en Estados Unidos gracias a la multiplicación de las plantaciones de marihuana donde encuentran refugio.
Por tanto, la expansión de los campos de marihuana tras la legalización (en el momento de escribir este artículo, un total de once estados estadounidenses han legalizado su cultivo) está contribuyendo a salvar a estos insectos y a recuperar sus poblaciones.
Según las investigaciones, hasta dieciséis especies diferentes de abejas se han propagado en los primeros años de la legalización de la marihuana. Por lo tanto, gracias al polen de la marihuana, las abejas han vuelto a proliferar.
Tampoco hay que olvidar que el cultivo de la marihuana se realiza sin el uso de productos químicos: se suelen utilizar insectos especiales para eliminar los parásitos del cáñamo. Esto protege la salud del consumidor final y, al mismo tiempo, la de las abejas que se alimentan del polen producido por las plantas de marihuana.
Sin embargo, la investigación estadounidense no es el único estudio que relaciona la marihuana con las abejas.
Una investigación realizada por la Universidad Maria Curie-Sklodowska de Lublin parece sugerir que el extracto de marihuana puede tener efectos beneficiosos para las abejas expuestas a los pesticidas utilizados en la agricultura. Los insectos analizados sobrevivieron tanto como los cultivados en hábitats naturales no contaminados por el hombre.
De confirmarse, este hallazgo sería significativo. Como hemos dicho, proteger las abejas significa salvaguardar la biodiversidad y, al mismo tiempo, proteger la seguridad alimentaria.
Según un reciente estudio de la Universidad sueca de Lund, existe una fuerte correlación entre la salud de las abejas y la calidad de la fruta que comemos. En consecuencia, ésta podría verse alterada si las abejas se exponen a sustancias nocivas.
Todo ello explica la creciente atención que reciben estos preciosos insectos y las numerosas iniciativas que se les dedican. Por ejemplo, la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) ha establecido que el Día Mundial de la Abeja se celebre el 20 de mayo de cada año.
También con el objetivo de preservar la especie, se están creando cada vez más “corredores ecológicos”, es decir, zonas libres de pesticidas u otros tratamientos químicos donde estos insectos pueden alimentarse y prosperar.
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La situación del cáñamo en España
Aunque la legalización no está en el horizonte, la comercialización de marihuana “legal”, también denominado “light” por su baja concentración de THC, está permitida en España desde 2017.
En concreto, la ley permite el cultivo (sin autorización previa) de determinadas variedades de cáñamo, siempre que estén certificadas y tengan un contenido de THC inferior al 0,2%.
Esta ley representó una importante novedad en el panorama español, ya que propició el nacimiento (y el rápido desarrollo) de un mercado de derivados legales del cáñamo, como textiles y materiales de construcción, aceites para cosméticos, productos para usos alimentarios, etc.
En conclusión, es bien sabido que el cáñamo es un recurso natural valioso y versátil. Lo que no sabíamos era que entre los muchos beneficios de esta planta también podría estar el de ayudar a restaurar las poblaciones de abejas en todo el mundo.
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